La madrugada del sábado se reportaba el deceso del ST 1ra. PNP Víctor Manuel Orrillo Viacaba, quien dejó de existir luego de dar dura pelea al COVID-19 por dos semanas, las fuerzas la abandonaron y la madrugada del sábado en el Hospital COVID-19 Simón Bolívar partió hacia el creador.
Con 34 años 6 meses de servicio en la policía, destacado en su tierra natal Bambamarca, venia cumpliendo su trabajo sin ningún contratiempo, pero en el cumplimiento de su deber fue contagiado y posteriormente trasladado de emergencia a Cajamarca, donde lamentablemente poco se pudo hacer para revertir su estado crítico de salud.
Familiares en compañía de sus colegas uniformados llegaron hasta los exteriores del cementerio de Cajamarca para despedirlo y darle cristiana sepultura cumpliendo los protocolos de inhumación. El tono melancólico de la trompeta hizo más sentido el dolor por la partida inesperada de un cajamarquino caído en labor.
Las malas noticias no terminaron ese día, ayer domingo nuevamente un cortejo fúnebre de policías y familiares acompañaban el féretro de T2da. José Alvarado Noriega, quien perdió la vida también a raíz del COVID-19 el Coronel PNP. Alberto Laureano, en el mensaje de condolencias destacó las virtudes de su colega quien era conocido como “Charapita”:
“Sabemos que ya estas con el Señor Todo Poderoso y nos vas a cuidar, a tus seres queridos, a tu familia, y hoy eres nuestro héroe. Descansa en paz”, fue el mensaje sentido que dirigió el Cnel. PNP Alberto Laureano Espíritu.
Cabe preciar que el primer policía que perdió la vida en Cajamarca hace unas semanas. Él fue destacado de Lima, pero contrajo la enfermedad en Cajamarca donde se complicó su estado de salud falleciendo y siendo inhumado en el cementerio de Cajamarca.