Pensó que era el final y que iba terminar muerto como sus demás compañeros. El taxista Antonio Gutiérrez Estacio (30) fue la última víctima de la peligrosa banda de maleantes, que por alguna razón no lo asesinaron, y lo dejaron abandonado a varios kilómetros de la ciudad, minutos antes de la zona turística Aylambo.
A las 11:40 minutos del último sábado, cuatro sujetos entre ellos una mujer, fingiendo ser clientes, le solicitaron una carrera en las inmediaciones de la av. La paz y Jr. Sucre. Una vez en el taxi, los bandidos lo redujeron con un arma de fuego, le vendaron los ojos, lo ataron de pies y manos y lo encerraron en la maletera del vehículo Station Wagon de placa SOP-261, de la empresa Latin Servis.
La víctima tras permanecer amarrado pudo notar que los delincuentes recorrieron el vehículo por varias horas, hasta promediar las 03:00 de la madrugada del domingo, cuando lo llevaron hasta el lugar retirado y lo abandonaron atado con una soga, entre la maleza.
En horas de la mañana, su conviviente María Luisa Arteaga Aguilar (25), al ver que no le contestaba el celular, empezó a sospechar que algo le había sucedido y llamó a los efectivos del Serenazgo para que ayuden a ubicar a su esposo.
Producto de la intensa búsqueda, personal operativo del Serenazgo logró ubicar al vehículo estacionado, en el camino al lugar denominado Aylambo, y metros después al hombre que exclamaba auxilio.
La víctima fue rescatada y con nerviosismo relató los momentos de angustia que pasó en manos de los delincuentes.
Los efectivos del Serenazgo comunicaron el hecho a la Policía de Investigación Criminal, que llegó al lugar para indagar sobre el caso y recoger pruebas que ayude a ubicar esta banda de malhechores que se han ensañado con los humildes taxistas.
Vea el video del rescate
Video: Altavista Corporación