Durante los últimos, se ha visto como la Fiscalía Anticorrupción actúa con orden, celeridad y firmeza ante cualquier delito cometido por funcionarios o servidores públicos, que ponga en riesgo o afecte el correcto uso de los fondos públicos.
En la UGEL Cajamarca la justicia no actúa con la misma rapidez, pues en la actual Gestión de Ciro Cáceres Santacruz, tras la denuncia pública en torno a las presuntas irregularidades cometidas en la contratación de Sandra del Rocío Quiliche Aguirre, esposa de Alfredo Ronald Pesantes Espejo, Jefe de la Oficina de Atención al Usuario Comunicaciones y Relaciones Públicas de dicha entidad, no se ha hecho nada.
Dicha ciudadana habría sido favorecida entre los meses de julio de 2022 a agosto del 2022– con dos órdenes de servicio (270 y 317) en las áreas pensiones y planillas de citada entidad.


Dichas órdenes fueron autorizadas para su pago por Cesar Eduardo Rivera Vera, jefe de administración de la UGEL Cajamarca, según expedientes SIAF 793 y 916.
Ante tal irregularidad, se espera que la fiscalía actué, con la investigación por los presuntos delitos de negociación incompatible, tráfico de influencias y nepotismo.
Fuente: La Prensa del Norte