Alianza Lima sufrió una dolorosa eliminación en la Copa Libertadores en medio de una montaña rusa de emociones. Lo que comenzó como un ambiente lleno de entusiasmo se transformó rápidamente en tristeza y decepción. El equipo nunca logró demostrar superioridad en el partido ante Atlético Mineiro, a pesar del apoyo incondicional de su afición.
Desde el inicio del encuentro, quedó claro que a los jugadores de Guillermo Salas les faltaba claridad y creatividad en el campo. Intentaron trasladar la pelota sin éxito, y su estrategia se basó principalmente en aprovechar las jugadas de pelota parada, aunque ninguna de ellas logró generar verdadero peligro para Everson, el arquero rival, quien se mostró relajado durante todo el encuentro.
Por otro lado, el equipo de Eduardo Coudet mostró un mayor control del balón desde sus salidas desde campo propio. Sin embargo, las jugadas y asociaciones no culminaron de manera efectiva, dejando en evidencia las limitaciones de ambos equipos en el último tercio del campo.
Aunque Atlético Mineiro no era el rival más temible en el partido de ida, dejó en claro que no iba a facilitarles las cosas a los jugadores de Alianza. A los 15 minutos, Hyoran envió un centro desde el córner de Matute, permitiendo que Battaglia ganara la posición sobre Barcos y cabeceara ligeramente desviado. Ese fue un aviso preocupante, pero lo peor estaba por venir y llenó de angustia no solo a los jugadores, sino también a los fanáticos aliancistas.
La noche se tornó aún más sombría cuando el arbitraje ignoró un claro penal a favor de Alianza. Fue como si los árbitros hubieran cerrado los ojos ante una evidente falta, privando al equipo de una oportunidad legítima de revertir el marcador. Pero el golpe final llegó cuando Hulk, el jugador estrella de Atlético Mineiro, dejó su huella con una definición imparable y anotando el 01, sumiendo en la desesperación a todo el estadio.
Alianza Lima mostró una falta de ideas y creatividad en el campo, dependiendo en gran medida de jugadas de pelota parada que resultaron ineficaces. Mientras tanto, Atlético Mineiro demostró un mayor dominio del balón, aunque también careció de contundencia en el último tercio del campo.
La eliminación de Alianza en la Copa Libertadores dejó en evidencia las limitaciones del equipo y la falta de recursos para competir a nivel internacional.
Los dirigidos de ‘Chicho’ Salas quedaron en el 4to puesto del grupo G, quedándole su último partido ante Atlético Paranaense en Brasil, lo que hace presagiar que Alianza Lima tampoco logrará alcanzar el 3er puesto que da un boleto a la Copa Sudamericana.